Con la derrota del domingo pasado ante Csis, el equipo no hizo más que confirmar la irregularidad que venía mostrando a lo largo del campeonato. De 6 victorias sólo 3 fueron consecutivas, y en las rachas se fueron cortando por empates sufridos y este último traspié. Las ausencias se hicieron sentir: Uop ante Círculo, Marto L. y Fabi contra los de Monte Grande. Se dejaron puntos en el camino. El segundo tiempo del fin de semana pasado demostró que si el Naranja, ademas de jugar, mete, será difícil pararlo, salvo que cometa erroras donde no se pueden cometer y lo pague caro, tal como sucedió ante Csis.
Desde lo grupal se festejan los retornos de Siro y Dani al primer equipo, la vuelta de Boro al banco de suplentes, esperando poder debutar en partidos oficiales. Se lamenta la ausencia de Juli por Bria (uno de los mayores enemigos del equipo) y la del arquero por suspensión. Ante esa situción, un jugador del plantel deberá calzarse los guantes y exponerse en una posición desconocida para la mayoría y muchas veces muy injusta. Pero quien lo haga dedicará el mayor esfuerzo posible y contará con el apoyo incondicional de sus compañeros y cuerpo técnico.
De esta manera encara el equipo el partido que se viene, ante Atlético CSHA en el Portugués (cada vez más nuestra casa). Quedan 3 fechas para terminar la primera rueda y el equipo buscará conseguir los 9 puntos en juego, siempre teniendo en cuenta el objetivo grupal, donde quien lo necesite será escuchado, tal como planteó Chuchel. Pero sin caprichos y tirando todos para el mismo lado.
Es momento de cortarse arriba y disfrutar, de terminar de demostrar de una vez que Gurei es el principal candidato. Es hora de despegar Naranja...
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